La elección de los colores estaba bastante clara; los de la Union Jack, claro. Sí, sí, ya sabéis, la bandera británica, que es tan chula que hasta nombre tiene. Y, en cuanto a símbolos reconocibles, ningún problema. Los ingleses tienen más que de sobra, que son muy suyos y muy tradicionales.
Los detalles hay que cuidarlos; cualquier idea loca ayuda a ambientar una fiesta, y la puede hacer mucho más especial. Sólo hay que tener un poco de imaginación!
El postre no puede faltar, y una tarta no es suficiente para una pandilla tan dulce, así que, mejor, dos; tarta de caramelo y tarta Guinness (sí, la cerveza, que es, también, muy británica, ella).
Aquí no nos gustan las despedidas; ni definitivas ni provisionales. Nos gusta tener el barco atestado de gente, de nuestra gente, y tenemos camarotes de sobra. Pero, como el viento no siempre sopla a favor y cada cual debe buscar su propio mapa del tesoro, nada como una despedida cálida y deliciosa para que, mientras agitamos los pañuelos desde la cubierta, lo hagamos con una sonrisa en los labios.
Una Princesa Pirata
Al barco de la princesa lo que le gusta son las fiestas no? Además amigas como tu, princesa, pocas.
ResponderEliminarNos encantan las fiestas, y cuando son para demostrar cuanto queremos a nuestras amigas, mucho más Paula! Y tu eres una de nuestras princesas favoritas!!
ResponderEliminarY yo con los ojos llenos de lágrimas a estas horas de la mañana... No sé qué sería de mí sin mis princesas piratas...Gracias, Capitana!!
ResponderEliminarGracias a ti piratilla. En nada la fiesta de "welcome again"!!! Un beso muyyyyyy grandeee
ResponderEliminarCómo moló ese día, cómo nos cuidas piratilla!!!
ResponderEliminaros cuido como os merecéis!!!! muchosssss besossssss
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